Envejecer es una etapa mas de nuestra vida. No por ello ha de significar perder calidad de vida
Mi consejo para una senectud sana es que mientras se pueda hay que:
- mantener la movilidad articular
- mantener la mayor independencia personal para el desarrollo de las Actividades de la Vida Diaria (AVDs)
- mantener la mente ocupada mediante actividades que resulten placenteras
- intentar mantener las relaciones sociales y la comunicación con las personas cercanas
- adaptar el domicilio para aumentar su seguridad y comodidad, sobre todo prevenir caídas
- prever y planificar estrategias para superar las dificultades que se puedan ir presentando en el futuro
Pero a menudo se padecen dolores articulares propios de la edad (artrosis, artritis) o se sufren enfermedades neurológicas como el accidente cerebrovascular (ictus), aparecen signos de demencia senil o Alzheimer.... y la normalidad se ve alterada. Tras el tratamiento hospitalario y de rehabilitación, una vez en el domicilio, hay que reestructurar el plan y a los objetivos anteriormente citados generalmente se añaden estos:
- reeducar las AVDs y entrenar los movimientos cotidianos en el domicilio o residencia
- asesoramiento de ayudas técnicas y adaptaciones en el domicilio para además, de seguridad, permitir que el paciente pueda seguir siendo lo más autónomo posible
- educar y aconsejar al cuidador y/o familia para facilitar el manejo del paciente dependiente
A lo largo de todo el proceso de rehabilitación interviene un gran equipo multidisciplinar (médicos, gerontólogos, enfermeros, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, trabajadores sociales...) pero es en el domicilio o residencia del paciente donde el terapeuta ocupacional juega un papel esencial para garantizar la mayor independencia personal posible y facilitar los cuidados.
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